Atrapado

Que si soy feliz? Podría decir que si; tengo salud, una familia que me quiere y un trabajo en donde puedo ayudar a los demás y aunque a veces es peligroso, la mayoría del tiempo lo paso viendo televisión con mis compañeros jeje.

El trabajo de un bombero en las ciudades pequeñas no siempre es activo, la gente llama para pedir ayuda con problemas cotidianos, es raro cuando en realidad tienes que arriesgar el pellejo por alguien.

Un día nos llamó una mujer muy preocupada por que su abuelo estaba encerrado en el baño, tenía más de 2 horas allí y no podía salir, al llegar nos encontramos con que la puerta del baño se abría fácilmente, le preguntamos a la señora que por que nos había hecho ir. Ella solo volteaba a ver la puerta y nos decía: es que esta “atrapado” en la regadera. Nos acercamos al anciano, quien permanecía detrás de la cortina a medio abrir, al escuchar que nos aproximábamos gritaba: no entren, que no entre nadie!.

-son los bomberos que vienen a ayudarlo Don Manuel!
--me vale madre quien sea, cierra la puerta! Que no entre nadie!

Sin entender aun lo que sucedía, mi compañero y yo nos mirábamos encogidos de hombros, le dije a la señora que si era un pleito familiar debería llamar a la policía.

-No estamos peleando, lleva casi tres horas allí y no deja entrar a nadie, primero me pidió que le pasara unas tijeras o un cuchillo, a lo cual me negué, por que últimamente ha estado deprimido y me dio miedo que quisiera suicidarse, después de 15 minutos de estar gritándome que las quería para cortarse la barba, accedí a llevárselas y se las pase por un ladito de la cortina, pasaron como 30 minutos y no salía, solo lo oía quejarse, después pego un espantoso grito, en ese momento me imagine lo peor, así que trate de entrar silenciosamente para ver lo que pasaba, logre abrir un poco la cortina y entre gritos y amenazas me pego con las tijeras en la mano y me dijo que me largara.

Ya hace como una hora que me confeso que estaba atrapado y no podía salir, no deja que nadie entre a ayudarlo, le dije que le hablaría a los bomberos para que lo sacaran de allí y me dijo que me fuera a la chingada con todo y bomberos, que el lo que necesitaba era un cuchillo o algo mas filoso y aventó las tijeras. Si ya tiene tanto tiempo allí encerrado es por que en verdad necesita ayuda, es un hombre muy viejo y se puede enfermar por estar tanto tiempo en la regadera.

_señor; somos los bomberos, nos hablo su nieta para que lo ayudemos a salir de allí, me podría decir cual es su problema?
--pues se pueden ir largando con todo y sus mangueritas, no los necesito! Aquí no se esta quemando nada!
_mire señor, nosotros no solamente apagamos incendios, también contamos con la herramienta para socorrer personas atrapadas en cualquier lugar, déjenos ayudarlo a salir de allí, solamente díganos, que es lo que le paso?
--pues estoy atrapado! Ya le dije!
_podríamos entrar a ayudarlo?
--no! Nadie va a entrar mientras yo este vivo!

La situación se estaba poniendo tensa, y no podíamos ayudar al hombre por que no quería que lo ayudáramos, pero por que no querría que lo ayudaran? Ahhh, la respuesta era tan lógica que al saberla me sentí mal por haber perdido tanto tiempo.

_señor; quiere que le pasemos algo para cubrirse?
--agh, si! A esta vieja sonsa no se le había ocurrido y me tiene aquí matándome de frío.
Pásame una toalla o mi bata Flor! Pero no vayas a asomarte!

La señora corrió a llevarle una bata y se la paso por el mismo espacio abierto de la cortina, solo asomando la mano.
_ahora podemos pasar a ayudarlo?
--nooo! Ya les dije que no necesito de ustedes!
_ahh, entonces ya puede salir solo?
--que no entiende que estoy atrapado?
_(suspirando de desesperación) entonces déjenos entrar a ayudarlo, le prometo que no lo vamos a ver!
--y si no ven como le van a hacer para ayudarme?
_pues vamos a ver solo la manera de sacarlo pero no lo vamos a ver a usted!
--es muy vergonzoso! Nunca me había pasado algo así! (el pobre hombre se soltó a llorar, yo seguía tratando de imaginar que era lo que le había sucedido)
_entonces podemos entrar a ayudarlo?
--entre, pero solo! Nomás usted! Y prométame por su madre que no me va a ver!
_se lo juro señor!

Entre despacio, tratando de no asustar al pobre viejo, tratando de imaginar la posición mas indecorosa que pudiera existir, para así, al llegar no hacer ninguna expresión, y mucho menos soltarme riendo.
_ya estoy aquí señor, ahora voy a abrir la cortina…
Lo que vi, fue un hombre ya de muy avanzada edad, sentado en una silla tejida, cubierto con la bata solo por encima, se tapaba la cara con una de las mangas.
Las personas de edad tan avanzada suelen bañarse sentados para evitar hacer esfuerzos grandes y para no resbalarse. Pero veía todo tan normal que seguía sin imaginarme por que no podía salir.
_se lastimo la espalda señor? Le duele algo? No se puede levantar?
--no! Ya le dije que estoy atrapado!
_Me puede decir que le paso?
--es la silla! Se pudrió con el agua.
-le dije que esa silla ya no servia abuelo!
Yo veía la silla totalmente de pie y el no se notaba hundido en ella
--tu cállate Flor! se rompió nomás de un pedacito!
_entonces cual es el problema? Le lastima si trata de pararse?
--lo que pasa es que al agacharme para lavarme la pierna…aghhh, Se me pellizco la piel de abajo en la silla y no puedo sacarla. Trate de cortar el tejido con unas tijeras pero esta muy dura! Y me duele como el diablo cada vez que me muevo.
Saqué unas tijeras de las que usamos para cortar lámina de metal y materiales muy duros y me dispuse a ayudarlo…
_tal vez sienta un poco de dolor señor, por que cortare la silla.
--ya he aguantado mucho el dolor! Nomás no me vaya a cortar a mi!
Me agache para ver que parte de la silla tenia que empezar a cortar y lo que vi fue horrible…
El pobre hombre tenia una buena parte de “sus partes” atrapada en el hueco de la silla, mi asombro me dejo paralizado por unos segundos, su piel se veía ya morada de tanto tiempo que había estado así…
Lo compadecí tremendamente y trate de darme prisa para acabar con su sufrimiento, después de unos minutos de gritos y cortes de silla, pude liberar al pobre hombre de su tormento, se lo llevaron de inmediato a la cruz roja y lograron salvarle el pellejo.

Moraleja: nunca arriesgues el pellejo sentándote en cueros en sillas tejidas!