crispurita

miércoles, junio 21, 2006

En Cuba moriría de hambre?

Como todo publicista traumado, una de las primeras cosas en las que me fije al llegar es que acá existe cero publicidad, claro, en un país donde el capitalismo se lo pasan por los cojones, mi profesión no vale madre, ni siquiera existe.
Comencé a cuestionarme moralmente, la publicidad no es más que una lavadera de cerebro para crear necesidades en una sociedad consumista hasta el culo.

“vender, vender, vender para que me paguen y asi poder comprar la misma mierda que vendo” (¿triste, no?)

Luego, caminando por allí, comencé a toparme con varios espectaculares bastante especiales, algunos con frases revolucionarias muy buenas, recordando al Che Guevara pero los más simpáticos de todos, los que se burlan del imperialismo o hacen ver a Buch como un monstruo, con colmillos, ojos malosos y toda la cosa. Ahhhh, Fue entonces cuando me sentí menos mal en mi papel de lava cerebros, esta mal eso de vender vidas perfectas pero es igual de malo vender ideas perversas, alimentando el odio entre naciones.